El primer dia llegue a Berlin, ciudad que me ha encantado, una ciudad que se camina, obviamente con mucha, mucha historia y con gente amable, es sorprendente pensar que en algún momento fue una ciudad dividida, pero al mismo tiempo se nos recuerda esta circunstancia de diferentes maneras, podemos caminar y encontrarnos con una línea de adoquines que cruza la calle sin motivo aparente hasta que encontramos el pequeño letrero que indica que alguna vez en esa línea se levantaba un muro, podemos admirar la arquitectura de alta tecnología en Postdamer Platz y econtrar al pie del rascacielos un pedazo de pared sobre la línea antes mencionada, pero tambíen podemos encontrar un parque con niños, actores con titeres, una jirafa hecha de Lego o un angel de la victoria con gran significado para los que nos gusta el cine...