Durante este pequeño descanso de fin de año aproveche para leer este nuevo libro de Juan Villoro: Dios es Redondo, ya antes había escrito que a mi no me gusta el futbol, sin embargo tengo amigos que mueren por este deporte, lo que me ha llevado a tener un poco de curiosidad así que cuando supe de la publicación de este libro me pareció que debía de leerlo, mas aun porque ya antes había leído “La casa pierde” del mismo autor y me había gustado mucho.
En resumen el libro habla sobre el futbol desde una perspectiva didáctica para aquellos como yo que no entienden mucho de la pasión que despierta este espectáculo, es un buen libro, me parece mas bien analítico pero con mucha emoción, describe personajes extraños que sorprenden mas a saber que son reales, las anécdotas también suenan muy extrañas (para mi), mas que nada el libro celebra la pasión de los aficionados al futbol, recorre el lado mercantil de la industria y el de los narradores a la vez que dedica muchas líneas a los jugadores. Un libro que aunque me pareció interesante no me animará a volverme un aficionado al deporte de las patadas.